Desde hace algún tiempo la generación nacida entre los años 1980 y 2000, conocida como los Millennials o Generación Y, se posiciona como pieza clave en nuestras sociedades, al traer consigo pensamientos y actitudes muy específicas sobre la tecnología, economía, valores, y trabajo, entre otros. De hecho, esta es una generación constantemente conectada a internet, experta en tecnología, y firme creyente de la importancia de la transformación digital. Es el grupo demográfico más influyente de los últimos tiempos, y en quienes se basan muchas de las estrategias de Comunicación, marketing y ventas.
Debemos partir de la idea que los millennials pasan más del 30% del tiempo conectados. Dentro de este periodo de tiempo, el 18% lo dedican a redes sociales como Facebook, Instagram y LinkedIn, el 6% lo utilizan para enviar y recibir mensajes y el otro 6% lo emplean para hablar con otras personas acerca de marcas o productos. (Ipsos y Crowdtap 2017)
Los millennials son plenamente conscientes que ellos lideran la transformación digital y también entienden perfectamente la brecha que existe entre lo que ofrecen las empresas y lo que necesitan los consumidores. La verdad es que nos encontramos ante un nuevo modelo donde estos nativos digitales no conciben un negocio que no esté creado en base a plataformas y aplicaciones.
Cada vez son más las muestras que confirman que los millennials tienen un impacto directo en la tecnología y su avance. Por ejemplo, una encuesta realizada por Penn Schoen Berland (2016) a millennials europeos revela que el 46% reconoció no comprar tecnología si no conoce a otra persona que la haya probado. Los smartphones son los gadgets estrella para ellos, pues un 56% opina que los mismos pueden sustituir a las laptops, ordenadores o tablets. Además, los millennials son promotores del avance de la conectividad y la consideran imprescindible en el futuro.
En este contexto, las empresas de la región deben dar un papel central a la tecnología en sus negocios, y considerar que su éxito es directamente proporcional a su nivel de innovación y creatividad. También vale la pena resaltar que casi cualquier negocio que quiera sobrevivir, sino prosperar, debería tener en cuenta a los millennials en cada decisión: desde estrategias de comercialización hasta redes sociales y marketing.
Es así, que analizamos específicamente la relación entre los Millennials y el e commerce. De hecho, está previsto que el e commerce represente una gran parte de la población laboral en el 2020, lo que significa que los millennials, siempre conectados, tienen una incidencia enorme en esta industria. Según Forbes, los millennials, a nivel mundial, gastan 600,000 millones de dólares anualmente, cifra que aumentará al 35% en el 2030.
Si estudiamos de cerca sus actividades económicas, vemos que los millennials prefieren comprar productos y/o servicios de empresas que generan un impacto positivo en la sociedad. No son fáciles de persuadir. Los millennials buscan comprar de empresas que sean transparentes y honestas con sus valores, sus recursos humanos, y su uso de la tecnología. Debemos entender que los millennials lideran el camino cuando se trata de compras, servicios bancarios y pagos móviles, y por lo mismo son quienes tienen mucho más chance que otras generaciones de adaptarse a un mundo regido por el móvil.
Para PayPal, comprender la conducta y hábitos de compra de los millennials equivale a ampliar nuestro horizonte y llegar a públicos nuevos, sobre todo en mercados como los latinoamericanos, que tienen tanto potencial para crecer su comercio electrónico. Es así como, en 2016, Ipsos (encomendado por PayPal), realizó un estudio donde se encuestó a 23.000 usuarios de Internet en 29 países, incluidos la Argentina, México, Brasil y los Estados Unidos, y demostró que, tomados en conjunto, los millennials encuestados en Latinoamérica realizaron más compras en línea que el resto de los usuarios generales de Internet: 66% frente a 62% (2015). En la Argentina, por ejemplo, el 47% de los compradores en línea millennials realizaron compras transfronterizas y locales, comparados con el 40% de compradores en línea en general.
También observamos que, en Latinoamérica, el 83% de los millennials que compran en sitios de otros países utilizaron PayPal para pagar sus compras durante (2016), frente al 75% de los compradores transfronterizos digitales en general.
Estas cifras nos confirman que debemos seguir enfocados en satisfacer las necesidades de esta generación que exige ser más asertivos a la hora de comunicarles los beneficios de un producto. La transformación digital ya es una realidad ineludible, y por ello es nuestra responsabilidad conocer a profundidad a quienes marcan el paso en este camino.