Empecemos diciendo que las industrias de tradición como los seguros y la banca tienen la necesidad de modernizarse frente a las nuevas tecnologías y soluciones que van apareciendo. Muchas empresas están buscando formas proactivas para impulsar la innovación, y una de estas, es asociarse con startups para así influir y contribuir con nuevas ideas desde la parte interna de las mismas.
De acuerdo con el reporte “
Corporate Venturing” realizado por Prodem, en Latinoamérica cerca de 150 empresas grandes están trabajando con más de 2.000 startups, con la motivación principal de encontrar una mejor y más rápida vía para innovar. Según el reporte, las grandes compañías que se están relacionando con empresas emergentes, pertenecen principalmente a las industrias de E-Commerce y Tecnología, en un 18,4%; Seguros y Sector Financiero, en un 16,2% y empresas de Telecomunicaciones, y en un 11,8%, así como sectores productivos más tradicionales.
Una nueva forma de abordar la innovación colaborativa
Ahí es donde entran en juego programas como las competencias de innovación. Con la capacidad de adaptarse a las necesidades de cualquier empresa, estas competencias son esencialmente una forma de desarrollo empresarial que se centra en la creación y celebración de nuevas y mejores ideas o soluciones, que son discutidas por un grupo de los mejores innovadores. Las competencias generalmente se ejecutan en el transcurso de varios meses, durante los cuales las compañías pueden identificar nuevas empresas que brinden una perspectiva diferente sobre su industria y evaluar oportunidades para alianzas a largo plazo.
Los objetivos de una corporación ayudan a determinar el tema y el cronograma de la competencia. Una vez que se deciden estos factores, el reclutamiento para nuevas empresas calificadas se realiza a través de numerosos canales, y expertos de la industria juzgan las mejores soluciones para el desafío declarado.
El vínculo entre diversidad e innovación
Cualquier enfoque que una empresa adopte para la innovación colaborativa debe tomar en cuenta un elemento clave que no debe pasarse por alto: la correlación positiva entre innovación y diversidad.
Un estudio reciente de BCG muestra que, tanto en las economías en desarrollo como en las maduras, las empresas con un perfil de diversidad superior a la media generaron el 45% de sus ingresos totales de la innovación frente a solo el 26% de las empresas con diversidad de liderazgo inferior a la media. Además, las organizaciones que cuentan con líderes diversos informaron un mejor desempeño financiero general.
La investigación es clara, pero persiste una falta de diversidad en las industrias que luchan por la innovación. Un informe de Mercer muestra que, cuando se trata de la diversidad de género en la industria de servicios financieros, a medida que aumenta el nivel de carrera, la representación femenina disminuye drásticamente. El mismo muestra que la comparación de empleados femeninos y masculinos en el nivel directivo es del 37% al 63%, en el nivel directivo superior del 26% al 74% y en el nivel ejecutivo del 15% al 85%. ¡Un panorama que se debe cambiar rápidamente en los próximos tiempos!
Muchas corporaciones han creado grupos de intereses especiales para empleados y enfocan en la diversidad en sus esfuerzos de reclutamiento para resolver el problema.
Ya sea que las corporaciones busquen apoyar a las mujeres en la tecnología desde una perspectiva de diversidad, inviertan en nuevas empresas sólidas y vanguardistas, o simplemente obtengan una mejor visión de lo están haciendo en su industria, una competencia de innovación es una forma convincente de reunir y promover factores que impactan fácilmente el éxito comercial de una empresa.